Brazil imperial: Samba a ritmo 4x

 

Bueno, pues ayer jugamos a Brazil imperial, y os explico un poco…

Se trata de uno de esos híbridos que se han dado en llamar Euro X, ya que implementan mecánicas para obtener recursos y gastarlos tipo euro, y mejorar acciones para poder explorar, explotar, expandirse y exterminar a los rivales. En estos juegos puede darse el caso de que sean una lucha individual por objetivos y carrera hacia los puntos de victoria, o que la violencia el saqueo y la exterminación de rivales sea la tónica general…

Las facciones también tienen cierta asimetría, y depende del personaje que lidere la tuya puedes aprovechar su característica para darte impulso en ciertas acciones. Un tablero modular con recursos base y zonas con niebla de guerra hace interesante la exploración y el dominio rápido, pero las mecánicas euro hacen que te veas obligado a planificar con antelación los recursos y acciones que necesitaras en el futuro, o la falta de recursos te ahogará. Te pueden gruñir las neuronas, ciertamente.

Mecánicas que recuerdan a las del Scythe, donde no puedes repetir la última acción y si mejoras alguna luego será más ventajoso usarla, acaban aumentando la asimetría de tu facción. La compra de cartas que dan puntos de victoria y ventajas dan el remate para que te des cuenta de que no lo puedes tener todo, y que cada recurso que gastes ha de estar bien calculado. 

El posible contacto entre jugadores (el mapa no es demasiado grande), y la posibilidad de que simplemente entrando en tu campo de caña de azúcar sin combate ni nada te roben los recursos, hace que debas pensar en explotar y proteger al mismo tiempo, calculando los posibles movimientos de los rivales. Podeis acabar lanzando bravatas corintias, si empieza la fiesta.

En nuestra partida, Napoleón avanzó rápidamente intentando la táctica blitzkrieg en una formación de punta de flecha hacia mis tierras, lo que me obligó a establecer fortificaciones en mis límites. Eso contuvo su avance unos turnos, pero se mantuvo patrullando la frontera manteniendo la tensión hasta el final. Por suerte, mis buenas defensas y la gran movilidad de su vecino indígena le hicieron diversificar fuerzas. Al parecer, el líder indígena podía arrastrar tropas con su monarca, lo que le hacia explorar y robar con seguridad. Mi otro vecino, un lord inglés estaba preparando la clásica táctica “bola de nieve”, llevando todas sus tropas a un punto estratégico de mi frontera para ser imparable y arrollar mis ciudades con una fuerza incontestable.

O sea que entre la amenaza temprana de ataques relámpago y la certeza de un ataque masivo en pocos turnos, estuve toda la partida más tenso que el pezón de un arquero.

Afortunadamente, la prudencia de las patrullas de Napoleón por una parte, y el tiempo que tardó en desplazar y acumular tropas el Lord inglés en mi puerta, hizo que mi carrera hacia cumplir todos los objetivos de mi señor, Don Juan Manuel I, no se viera interrumpida en exceso, y conseguí la victoria. 

Divertida partida con puntuaciones no muy distantes al final. El tono de las partidas lo determinaran la actitud de los jugadores. Un juego con cierta complejidad, pero muy recomendable, con mezcla de Euro y 4x.

Hasta la próxima!

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